Todos sabemos que existen técnicas de depilación tan comunes que pueden realizarse en casa, otras que tienen una larga tradición ancestral, pero la tecnología también llegó y poco a poco ha ayudado a desarrollar métodos más efectivos y menos dolorosos.
Es el caso de la fotodepilación, luz pulsada o IPL. Este tratamiento se ha convertido en uno de los más solicitados, ya que inhibe el dolor -solo se siente una leve punzada- y retrasa el crecimiento del vello al punto de desaparecerlo en su totalidad, gracias a su sistema de aplicación en frio.
Se necesitan varias sesiones para que el tratamiento funcione. Van desde un mínimo de 6 a 8, hasta 12 a 15, dependiendo de la zona a tratar, el tipo de piel, de vello y la sensibilidad de la persona. Puedes preguntar por este tratamiento en Vellísimo Center.