Cumpliendo con el compromiso de recuperar el Centro Histórico de la capital, el alcalde de Lima, Jorge Muñoz, entregó a la ciudad las estatuas del Ángel de la Resurrección a la entrada del cementerio El Ángel y del sacerdote Jorge Dintilhac en la plaza Francia completamente recuperadas.
Ambos trabajos de mantenimiento y restauración, respectivamente, fueron paralizados debido al aislamiento social obligatorio ante el COVID-19 y se reanudaron luego de las nuevas medidas dictadas por el Gobierno en julio de este año.

Las tareas de mantenimiento del Ángel de la Resurrección incluyeron la eliminación del óxido en la figura de hierro y la aplicación de capas de protección. En tanto, a la estatua de bronce del sacerdote Jorge Dintilhac se le retiraron los recubrimientos de pintura, y le fueron restituidos los dedos índice y medio de la mano derecha.
El encargado de bendecir la primera pieza fue el obispo auxiliar de Lima, monseñor Guillermo Elías, en presencia del alcalde Jorge Muñoz; el subgerente de Negocios y Cooperación de la Beneficencia de Lima, Daniel Cáceda; y el gerente de Prolima, Luis Martín Bogdanovich.
En tanto, en la ceremonia de develación de la escultura del padre Jorge Dintilhac estuvieron presentes el alcalde Jorge Muñoz; Jorge Lossio, director del Instituto Riva-Agüero de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP); el padre Raúl Pariamachi, provincial de los Sagrados Corazones; el padre Brian Cruz, párroco de la parroquia Sagrados Corazones Recoleta; y el arquitecto Bogdanovich.
Sobre las esculturas restauradas
Jorge Dintilhac fue un sacerdote de los Sagrados Corazones que trabajó en el colegio que administró su orden en Lima, ubicado detrás de la iglesia La Recoleta. En 1917 fundó la PUCP y fue rector de esa casa de estudios por 30 años. El escultor Joaquín Roca Rey fue el encargado de elaborar el monumento de bronce en su honor, el cual fue develado el 30 de setiembre de 1960.
Por otro lado, la escultura del Ángel de la Resurrección fue encargada en 1875 a la fundición Barbezat & Co. Val D’Osne. La figura, hecha por el escultor francés Hippolyte Francois Moreau, se instaló, entre 1870 y 1873, a la entrada del cementerio El Ángel.